¿El día y la noche son iguales en Marte que en la Tierra? Te lo contamos
Marte es el cuarto planeta del sistema solar y el más parecido a la Tierra en cuanto a tamaño, clima y geología. Sin embargo, también es un mundo muy diferente y hostil para la vida humana. Su atmósfera es muy delgada y está compuesta principalmente de dióxido de carbono, su temperatura media es de -63ºC y varía mucho entre el día y la noche, su superficie está cubierta de polvo rojo y rocas volcánicas, y su gravedad es solo un tercio de la terrestre. Además, está expuesto a una alta radiación solar y cósmica que puede dañar las células y el ADN.
Pero ¿cómo es el día y la noche en Marte? ¿Qué diferencias hay con respecto al ciclo diurno-nocturno de la Tierra? En este artículo te lo contamos.
La duración del día y la noche en Marte
La duración del día y la noche en Marte es prácticamente la misma que en la Tierra, de 24 horas y media aproximadamente. Esto se debe a que ambos planetas tienen una rotación similar sobre su propio eje. Sin embargo, hay una pequeña diferencia que se acumula con el tiempo: mientras que un día terrestre equivale a 23 horas, 56 minutos y 4 segundos, un día marciano equivale a 24 horas, 39 minutos y 35 segundos. Esto significa que cada 37 días marcianos se pierde un día terrestre.
Esta diferencia también afecta al calendario marciano, que tiene que ajustarse al movimiento orbital del planeta alrededor del Sol. Mientras que un año terrestre equivale a 365 días, un año marciano equivale a 687 días. Por tanto, las estaciones en Marte duran casi el doble que en la Tierra. Además, las estaciones en Marte no son iguales en ambos hemisferios, ya que la órbita marciana es más elíptica que la terrestre. Esto hace que el verano sea más largo y cálido en el hemisferio sur, mientras que el invierno sea más largo y frío en el hemisferio norte.
La variación de la temperatura entre el día y la noche en Marte
La variación de la temperatura entre el día y la noche en Marte es muy elevada como corresponde a una atmósfera tan tenue. La atmósfera marciana tiene una presión de solo 0,6% de la presión atmosférica terrestre al nivel del mar, lo que implica que retiene poco calor y que hay poca difusión de la luz solar. Esto hace que la temperatura dependa mucho de la latitud, la altitud, la estación y la hora del día.
La temperatura media superficial en Marte es de unos -63ºC, pero puede oscilar entre los -125ºC cerca de los polos en invierno hasta los 20ºC al mediodía cerca del ecuador en verano. La variación diurna de las temperaturas puede ser de hasta 60ºC o más, lo que supone un gran contraste térmico entre el lado iluminado y el lado oscuro del planeta.
Estas variaciones de temperatura también influyen en los fenómenos meteorológicos de Marte, como los vientos, las nubes o las tormentas de polvo. Los vientos se producen por las diferencias de presión entre las zonas cálidas y frías del planeta. Las nubes se forman por la condensación del vapor de agua o del dióxido de carbono presentes en la atmósfera. Las tormentas de polvo se originan por el levantamiento del polvo superficial debido a los vientos o a las corrientes térmicas.
El aspecto del cielo durante el día y la noche en Marte
El aspecto del cielo durante el día y la noche en Marte también es diferente al de la Tierra. Durante el día, el cielo marciano suele tener un color anaranjado o amarillento debido al polvo suspendido en la atmósfera que dispersa la luz solar. Sin embargo, cerca del horizonte puede verse un tono azulado debido a que el polvo es más fino y dispersa más la luz azul. Durante el atardecer o el amanecer, el cielo puede adquirir tonos rojizos o violetas por el mismo motivo.
Durante la noche, el cielo marciano suele tener un color negro debido a la falta de luz solar y a la escasa luminosidad de las estrellas. Sin embargo, se pueden observar algunos fenómenos astronómicos interesantes como las fases de Venus o Mercurio, los eclipses solares o lunares causados por las dos lunas de Marte (Fobos y Deimos), o las lluvias de meteoritos provocadas por los restos de cometas o asteroides.
En conclusión, el día y la noche en Marte son muy distintos a los de la Tierra por las condiciones físicas y ambientales del planeta rojo. Estas condiciones suponen un reto para los posibles exploradores o colonizadores humanos que quieran vivir en Marte.
