¿Como influye la Luna en las mareas terrestres? Te lo cuento:
Las mareas son los cambios periódicos del nivel del mar que se producen por la atracción gravitatoria de la Luna y, en menor medida, del Sol sobre la Tierra. La Luna tiene una gran influencia sobre las mareas porque está más cerca de la Tierra que el Sol y porque su órbita es elíptica, lo que hace que su distancia y su fuerza gravitatoria varíen a lo largo del mes.
¿Cómo se forman las mareas?
La Luna atrae el agua de los océanos hacia ella, creando un abombamiento en la superficie del mar que se llama marea alta o pleamar. En el lado opuesto de la Tierra, también se forma otro abombamiento por efecto de la inercia, que es la tendencia de los cuerpos a mantener su estado de movimiento. Así, en los puntos de la Tierra más cercanos y más lejanos a la Luna hay marea alta, mientras que en los puntos perpendiculares hay marea baja o bajamar.
La Tierra gira sobre su eje una vez cada 24 horas, mientras que la Luna orbita alrededor de la Tierra una vez cada 27,3 días. Esto hace que las posiciones relativas de la Tierra y la Luna cambien constantemente y que las mareas se desplacen alrededor del planeta. Así, cada punto de la costa experimenta dos mareas altas y dos mareas bajas cada día, con un intervalo de unas 12 horas y 25 minutos entre cada una.
¿Qué factores influyen en las mareas?
La altura y el momento de las mareas dependen de varios factores, entre los que se destacan:
- La fase lunar: cuando la Luna está en cuarto creciente o menguante, forma un ángulo recto con el Sol y la Tierra. Esto hace que las fuerzas gravitatorias se contrarresten parcialmente y que las mareas sean más pequeñas. Se llaman mareas muertas. Cuando la Luna está en luna nueva o llena, se alinea con el Sol y la Tierra. Esto hace que las fuerzas gravitatorias se sumen y que las mareas sean más grandes. Se llaman mareas vivas.
- La distancia lunar: cuando la Luna está en perigeo, el punto más cercano a la Tierra en su órbita, su fuerza gravitatoria es mayor y las mareas son más altas. Cuando la Luna está en apogeo, el punto más lejano a la Tierra en su órbita, su fuerza gravitatoria es menor y las mareas son más bajas.
- La forma de la costa: las características geográficas de la costa influyen en cómo se distribuye el agua del mar y cómo se reflejan las ondas de las mareas. Por ejemplo, las bahías estrechas y profundas pueden amplificar el efecto de las mareas, mientras que las costas planas y extensas pueden atenuarlo.
- El clima: los vientos y las presiones atmosféricas pueden modificar el nivel del mar y alterar el comportamiento de las mareas. Por ejemplo, los vientos fuertes pueden empujar el agua hacia la costa o alejarla de ella. Las tormentas y los huracanes pueden causar mareas anormalmente altas o bajas.
¿Qué importancia tienen las mareas?
Las mareas tienen una gran importancia para la vida en la Tierra, ya que afectan a los ecosistemas marinos y costeros, al clima, a la navegación y a las actividades humanas. Algunos ejemplos son:
- Las mareas permiten el intercambio de nutrientes, oxígeno y organismos entre el mar y la tierra, favoreciendo la biodiversidad y la productividad de los ecosistemas acuáticos.
- Las mareas influyen en el clima al transportar calor desde los trópicos hacia los polos, contribuyendo a regular la temperatura global.
- Las mareas facilitan o dificultan el acceso a los puertos y las rutas marítimas, por lo que los navegantes deben tenerlas en cuenta para planificar sus viajes y evitar riesgos.
- Las mareas ofrecen oportunidades de ocio y turismo, como la pesca, el surf, el buceo o la observación de la naturaleza. También permiten el aprovechamiento de la energía mareomotriz, que es la que se obtiene del movimiento del agua provocado por las mareas.